Argentina se encuentra a las puertas de dar un gran paso en la senda hacia la transición energética renovable con un ambicioso proyecto solar fotovoltaico. Este mega desarrollo será levantado en una gran zona desértica de la provincia donde la radiación para este tipo de iniciativas se vislumbra como óptima. Gracias a esta iniciativa, Argentina promete emerger como referente en América Latina en el campo de la energía solar. Un proyecto ambicioso que busca aprovechar a tope los recursos naturales que posee la región y que le permitirán satisfacer de forma exitosa gran parte de su demanda de energía eléctrica.
La provincia de Neuquén en la Patagonia Argentina, es reconocida y valorada por su clima seco y sus zonas desérticas donde abunda la radiación solar. Esto la ha convertido en el escenario perfecto para el desarrollo de uno de los más ambiciosos proyectos de energía solar, no sólo de Argentina, sino de toda América Latina.
En un amplio terreno semidesértico de 1000 hectáreas, en el mes de febrero de 2025 se iniciarán las obras de construcción del mega parque solar fotovoltáico con el que se espera cubrir la demanda energética de la región gracias a una capacidad de generación aproximada de 50 megavatios.
Aspectos a destacar del proyecto solar neuquino:
1- Cuenta con una ubicación estratégica: Las condiciones óptimas que posee Neuquén para desarrollos de energía solar tales como su alta radiación, la baja nubosidad y temperaturas moderadas, hacen posible una maximización del rendimiento de los paneles solares.
2- Gran capacidad de generación energética: Gracias a su alta capacidad de generación, se prevé que el nuevo parque abastezca con éxito hasta un tercio del consumo eléctrico de la ciudad de Neuquén, marcando con ello, un hito en materia de generación renovable en Argentina.
3- Su alto impacto en el desarrollo económico regional: Además de gran contribución en lo energético, el desarrollo será una fuente de generación de empleos en los sectores de la construcción, operación y mantenimiento del parque solar, impulsando en ello, el desarrollo integral y económico de la región.
El proyecto se encuentra orientado no solo hacia la satisfacción de la demanda energética a nivel local, sino además, en la promoción de la sostenibilidad del medio ambiente. Al exportar sus fuentes de recursos renovables, Neuquén buscará disminuir de modo exponencial , su dependencia de fuentes de combustible fósil y con ello, la reducción de las emisiones de carbono. Una estrategia a largo plazo para avanzar con decisión por la senda de su autodeterminación energética.
Los beneficios adicionales del proyecto:
1- Potenciador del desarrollo urbano: La nueva infraestructura solar propiciará el surgimiento de nuevas oportunidades de desarrollo urbanístico, que incluyen una estación transformadora y la construcción de un parque ambiental para integrar la energía limpia a todo el entorno urbano.
2- Brindará autonomía en materia energética: El proyecto solar renovable hará posible que la región disminuya su dependencia de los precios de la energía fijados por el gobierno nacional, fomentando con ello la estabilidad local en el plano económico.
Un modelo a imitar para toda América Latina
Según datos aportados por Global Energy Monitor, la capacidad eólica y solar en América Latian podría experimentar un crecimiento de más del 450% para el año 2030 . El proyecto neuquino no solo será beneficioso para la Argentina, sino que también posicionará a toda la región como un agente central en la lucha para poner freno al cambio climático.
Con el nuevo parque solar en el desierto neuquino, Argentina buscará generar un cambio estructural, de base hacia un modelo energético sostenible y 100% renovable. Este desarrollo es evidencia cierta del gran potencial de América Latina como región para liderar con firmeza y acierto la transición global hacia las energías renovables, aprovechando todo su caudal de conocimientos y sus recursos naturales.
Con esta iniciativa solar, las zonas más desérticas que posee la provincia de Neuquén, y que hasta el momento permanecieron inexplotadas o subutilizadas, se convertirán en un enclave estratégico del futuro energético del país, demostrando con toda claridad cómo la innovación y la tecnología aplicada junto al conocimiento, pueden transformar las regiones más áridas e inhóspitas del mundo en fuentes de oportunidades para el desarrollo sostenible.