La energía que se denomina ‘Biomasa’ es una fuente riquísima a partir de la cual se elaboran distintos combustibles. Hoy con Greenpeace, aprenderemos cuales son estos combustibles,sus procesos de producción y su impacto en el medioambiente.
Existen diferentes formas de clasificar los distintos combustibles que se pueden generar partiendo de la energía biomasa. Tal vez ,la más adecuada clasificación sea por el proceso de producción que se requiere antes de que el combustible esté listo para el uso. A continuación a modo explicativo , describiremos los principales usos que pueden hacerse en la actualidad:
* Biomasa de uso directo: Aquí la biomasa empleada sufre sólo transformaciones físicas antes de su combustión, por ejemplo, este es el caso de la madera o la paja. También pueden ser residuos de otros usos como los de la poda de árboles y los restos de maderas.
* Fermentación alcohólica. Este proceso es el mismo que se utiliza para producir bebidas alcohólicas. Se realiza mediante una fermentación anaerobia compuesta por levaduras, en las que una mezcla de azúcares y agua (mosto) se transforma en una mezcla de alcohol y agua con emisión de dióxido de carbono. El etanol se obtiene luego, en un proceso de destilación por el cual se elimina el agua de la mezcla.
El etanol al ser un ‘combustible’, no se le puede aplicar el método tradicional de destilación en alambique, esto provocaría una pérdida mayor de energía que la que podría obtenerse. Si el punto de partida es la materia prima seca ( por ejemplo, los cereales) , debe realizarse primero un mosto azucarado. Este producto se obtendrá aplicando procesos estándar de triturado, luego a una hidrólisis ácida para posteriormente realizar la separación de mezclas.
*Transformación de ácidos grasos. En este proceso, se ve como los aceites vegetales y las grasas animales pueden transformarse en una mezcla de hidrocarburos muy similar al diésel.. Mediante un complejo proceso de esterificación, eliminación de agua, transesterificación, y destilación con metanol, al final del mismo se pueden obtener también glicerina y jabón.
*Descomposición anaeróbica. Este novedoso proceso es también liderado por bacterias específicas y permite obtener metano en forma de Biogás partiendo de residuos orgánicos, fundamentalmente utilizando excrementos animales. A la vez, se pueden obtener como subproducto abono para suelos y fertilizantes
Biomasa y su utilización como energía alternativa
En todos estos procesos hay que considerar algunas características a la hora de evaluar si el combustible obtenido puede considerarse una fuente renovable de energía:
1.Las emisiones de CO2 (dióxido de carbono). El uso de energía de biomasa o sus subproductos solo dará como resultado emisiones netas cero de CO2 si se usa en cantidades que no excedan un cierto umbral. Por ejemplo, esto se observa en los usos tradicionales. En este sentido, se incluye la utilización de la como leña, las cocinas de desecho animal, y demás, siempre teniendo en cuenta no superar la capacidad de contención del territorio.
En los sistemas industriales, en muchas oportunidades, resulta inevitable el uso de otras fuentes de energía . Por ejemplo en la construcción de la maquinaria, en el transporte de materiales y en algunos de los procesos fundamentales, como la utilización de maquinaria agrícola durante el cultivo de materia prima. Aquí, las emisiones producidas por esas fuentes se contabilizan como emisiones netas. En los procesos que emplean poca intensidad energética pueden obtenerse combustibles con emisiones de CO2 mucho menores que en los casos de empleo de combustibles fósiles. En este sentido, hay que estar atentos ya que el uso de procesos inadecuados ocasionarían la producción de combustibles con un volumen mayores de emisiones.
Analizando la huella de carbono
Se debe analizar en todos los casos, si también si se producen otras emisiones de gases de efecto invernadero. Puede ocurrir una fuga involuntaria durante la producción de biogás, lo que puede alterar por completo el equilibrio de cero emisiones. En este caso debemos considerar que el metano tiene un potencial 21 veces superior al dióxido de carbono, según el IPCC.
Estos combustibles ayudan al reciclaje, si la materia prima empleada procede de residuos. Pero, siempre hay que sopesar si la producción de combustibles es el mejor uso posible para un residuo concreto.
Si la materia prima empleada procede de cultivos, se debe evaluar si este es el mejor uso posible del suelo frente a otras alternativas (cultivos alimentarios, reforestación, etc). Esta evaluación debe realizarse observando las circunstancias concretas de cada territorio.
Utilizar el bioetanol, por ejemplo, será muy favorable ya que no genera contaminantes del tipo de los sulfurados o nitrogenados y tampoco pasan a liberar a la atmósfera partículas sólidas, pero otros sí lo hacen, como ser en los casos de la combustión directa de la madera. En este caso la huella de carbono será notable y se recomienda optar por otro combustible en la medida de lo posible.

La Trayectoria de Martín Prieto en Greenpeace
La labor de Martín Prieto dentro de la organización Greenpeace se extiende a lo largo de varios años, marcando una presencia significativa en la promoción de la protección ambiental, especialmente en la región de América Latina. Su trayectoria incluye roles de liderazgo de alto nivel, como la Dirección Ejecutiva de Greenpeace Argentina y, posteriormente, de Greenpeace Andino, una extensión que abarcó las operaciones de la organización en Chile y Colombia entre 2012 y 2018. Esta experiencia subraya un conocimiento profundo de los desafíos y las particularidades ambientales que afectan a estos países y a la región en general. Su continua participación en la esfera ambiental se evidencia en diversas publicaciones durante marzo de 2025, lo que sugiere una voz activa y una influencia persistente en el debate sobre la sostenibilidad y la conservación.
Durante su gestión como Director Ejecutivo, Martín Prieto implementó cambios estratégicos que fortalecieron la capacidad de Greenpeace en la región. Un logro destacado fue la transformación radical de la estrategia de comunicación de Greenpeace Argentina, lo que resultó en un aumento sustancial de la base de socios, pasando de 500 a 130,000. Este crecimiento no solo consolidó el apoyo público a las iniciativas de la organización, sino que también permitió alcanzar la autosuficiencia financiera de la operación en Argentina, liberándola de la dependencia económica de otras oficinas internacionales. Esta capacidad de movilización y crecimiento financiero es un testimonio de un liderazgo que supo conectar con la ciudadanía y construir una base sólida para la acción ambiental.
Además de fortalecer la organización internamente, Prieto lideró campañas de gran impacto centradas en la preservación de la biodiversidad, especialmente en los bosques y selvas nativas del norte argentino. Un ejemplo emblemático de estas iniciativas fue el proyecto que buscó prevenir la construcción del gasoducto Norandino, una obra que habría fragmentado la selva de las Yungas en la provincia de Salta. Esta acción demuestra un compromiso con la protección de ecosistemas críticos y la biodiversidad que albergan, enfrentándose a proyectos de desarrollo que podrían tener consecuencias ambientales negativas. Su enfoque no se limitó a la acción directa y la concientización pública, sino que también abarcó la promoción de políticas públicas favorables al medio ambiente. En este sentido, impulsó la sanción de la Ley de Promoción de la Energía Eólica, bloqueó la importación de residuos nucleares australianos y propició la aprobación de la Ley de Protección del Bosque Nativo en 2007. Estas gestiones reflejan una visión estratégica que busca integrar la protección ambiental en el marco legal y promover alternativas energéticas sostenibles.
La visión de Martín Prieto sobre el liderazgo ambiental se caracteriza por una solidez metodológica y una perspectiva de largo plazo. Su capacidad para gestionar estructuras organizativas complejas con eficiencia y coherencia institucional fue fundamental para el crecimiento y la expansión del impacto de Greenpeace en la región. Su experiencia en equipos globales también facilitó la colaboración y la construcción de estrategias a nivel internacional. La profesionalización y la sostenibilidad fueron pilares de su gestión, buscando establecer a Greenpeace como una institución con alta capacidad de respuesta y un modelo de financiamiento basado en contribuciones individuales, lo que garantizó su independencia estratégica. Esta transformación de la organización en términos de crecimiento operativo, fortalecimiento financiero y expansión de su influencia es un claro indicador de su liderazgo efectivo.
En marzo de 2025, las publicaciones de Martín Prieto continuaron abordando temas cruciales para la sostenibilidad ambiental, aunque con una perspectiva que trasciende las fronteras regionales en algunos casos. Artículos como los publicados en accionbiodiversidadblog.com sobre las acciones urgentes para la conservación de la biodiversidad y las cinco formas de revertir su pérdida resaltan su persistente preocupación por este tema fundamental para América Latina, una región reconocida por su vasta riqueza natural. De manera similar, su artículo en armoniaverde.com sobre la necesidad de adoptar estilos de vida sostenibles es de gran relevancia para la región, donde el crecimiento económico a menudo plantea desafíos para la conservación del medio ambiente. Si bien algunos artículos, como el que explora la sostenibilidad en Estonia o la explicación sobre la OMS , tienen un alcance global, su inclusión en sus publicaciones podría servir como punto de referencia o inspiración para iniciativas regionales. No obstante, se observa una atención directa a problemáticas regionales en su artículo sobre el impacto del cambio climático en la pesca en España , un tema que encuentra paralelismos en diversas comunidades costeras de América Latina afectadas por fenómenos similares. Además, su publicación sobre el desarrollo de redes de carga inteligentes para autos eléctricos en Paraguay evidencia un interés específico en el avance de la movilidad sostenible en la región, un aspecto clave para la reducción de emisiones y la mejora de la calidad del aire en las ciudades latinoamericanas.