Greenpeace desanda el camino que el país ha recorrido en materia de proyectos eólicos. Grandes desarrollos y posibilidades a nivel territorial que se ven frenadas por la realidad económica actual.
En la Argentina existen 57 parques eólicos. Suman en total 900 aerogeneradores con una potencia instalada de 3292MW. Esta cifra es apenas un 9,41% por ciento del total de la capacidad de generación eléctrica que proviene de fuentes térmicas, pero lo suficiente para pensar en un escenario futuro que, en materia eólica, pueda contribuir en la disminución de las emisiones de CO2 .
Según expertos, la Argentina está en una excelente posición. Posee vastos territorios con condiciones que en relación al clima, le garantizan la viabilidad del aprovechamiento efectivo de las ráfagas de viento que harían mover las aspas del circuito productivo y positivo de las energías renovables eólicas.
En esta dirección, apunta un informe elaborado por la Cámara Argentina de Energía Eólica (CEA), que indica que el 70 por ciento del territorio argentino posee vientos de magnitud suficiente para producir energía. Esto se debe a la intensidad y a la persistencia de sus ráfagas, en dónde la Patagonia se ubica como la región con mejores posibilidades para desarrollos de parques eólicos. Y, por otro lado, la Patagonia es la región que lidera en la actualidad, el ranking de capacidad instalada, con unos 1576 MW. En segundo lugar se ubica el área de Capital Federal y GBA con 1178 MW; la región del Comahue, con 254 MW; el Noroeste, con unos 159 MW y la región Centro, con 129 MW.
Las mejores posibilidades que se frenan por los altos costos
” Argentina ha sido rankeada por el Global Wind Atlas, como uno de los países que alberga mayores potencialidades. Tenemos regiones que se ubican en el mismo nivel que las mejores del mundo, tanto para la instalación de proyectos offshore como onshore, principalmente en la región de la Patagonia”, dice Fernando Salvetti del Centro Argentino de Ingenieros (CAI).
Salvetti, explica que el mayor inconveniente es que los aerogeneradores cotizan en dólares, detalle no menor que los pone fuera del alcance sin programas razonables de financiamiento. Este fue el factor que frenó la realización de muchos de los proyectos que fueron adjudicados hasta 2017- y es en la actualidad uno de los temas centrales a resolver si se quiere apostar de lleno a ampliar la matriz eólica. ” Los desarrollos y proyectos de energía eólica dependen fundamentalmente de un buen canal de financiación. Otro problema que preocupa, es el de las importaciones ya que no solo impacta de modo negativo en el desarrollo de nuevos parques eólicos sino en su mantenimiento y operatividad”, advierte.
Por otro lado, los parques están ubicados en lugares alejados y se dificulta el traslado de la energía. “La energía eólica es muy difícil de trasladar y requiere de importantes inversiones en el área del transporte eléctrico para llegar hasta el lugar de consumo” explica Salvetti.
El papel de la energía eólica en el contexto nacional
“Durante 2022, las energías renovables abastecieron -en promedio- el 13 por ciento del consumo eléctrico de la Argentina, de los cuales el 76% de esta generación provino de los parques eólicos”
En Argentina , gran parte de los parques eólicos son privados, que venden la energía producida a Cammesa o la utilizan para su autoabastecimiento. Por ejemplo, la empresa Genneia lidera el rubro en el país, con 4 parques en Chubut y otros 3 en la provincia de Buenos Aires
En Argentina, la coyuntura macroeconómica, a la que se suman los vaivenes de la economía global con aumentos en las tasas de referencia de la Fed que impulsan al alza los niveles de retornos de activos, son situaciones que generan un vacío de nuevos desarrollos eólicos. Y, aunque se contara con excelentes condiciones económicas , aún quedaría por resolver el tema de la ampliación de la capacidad de transporte, ya que en la actualidad, la capacidad de transporte se encuentra en estado de saturación lo que no haría viable la incorporación de nuevos desarrollos y proyectos al sistema integrado”, señala Calvetti.
Un desafío a sortear para la Argentina ya que la Ley 27.191, indica que el 20 % de energía eléctrica deberá ser de corte renovable para el 2025. Por otro lado, la Argentina adhirió su compromiso en la (COP26) la última Conferencia de las Naciones Unidas para tratar el Cambio Climático , a alcanzar ambiciosa la meta de que el 30 por ciento de la matriz energética nacional sea cubierta con energías renovables. “Cumplir la meta acordada en la COP26 implica llevar adelante un importante desafío a nivel tecnológico,logístico e industrial, que requiere de una inversión aproximada de US$ 30.000 millones durante la próxima década” finalizó Salvetti .