Greenpeace te acerca al conocimiento de las fuentes de energías renovables. Qué son y cómo utilizarlas para el uso doméstico e industrial y potenciar un medioambiente sano y sustentable.
Conociendo en qué consiste la energía solar.
Cuando hablamos de energía solar, nos referimos a un tipo de energía renovable que se obtiene a partir de la radiación electromagnética del Sol. Se considera una ‘energía renovable’ porque la fuente a partir de la que se obtiene es natural e inagotable, como lo es el Sol.
Para poder generar energía solar, se utilizan dispositivos tecnológicos que se diseñan especialmente para tal fin. Por ejemplo, los más conocidos que se usan para captar la luz solar son las células fotoeléctricas (que conforman los paneles fotovoltaicos que todos conocemos), heliostatos o colectores solares, que posteriormente la transforman en energía solar térmica (a través de la temperatura) o energía solar fotovoltaica (a través de la luz).
Son múltiples los beneficios que se obtienen de la energía solar. Si bien el hombre dispone de otros tipos de energías renovables como son la eólica, hidráulica o geotérmica, la energía solar se ha popularizado como una de las energías renovables más fáciles de producir. Además, ha sido el mojón que ha democratizado el acceso a fuentes de energía verde.
Conociendo las ventajas y los beneficios de la energía solar
La energía solar es 100% ecológica. Proviene de una fuente inagotable de energía como lo es el Sol. Este astro que mantiene la vida en el planeta, estará con nosotros durante millones de años más y, si bien, hoy la supervivencia en el planeta está amenazada en su conjunto, el Sol es fuente de soluciones claves para lograr la conservación medioambiental. Sus radiaciones son plausibles de ser transformadas en energía térmica o fotovoltaica. Un tipo de energía que no produce residuos, a diferencia de la energía nuclear o de las energías fósiles.
Este tipo de energía tiene un menor impacto en el medio. Aunque otras energías renovables son también inagotables y sin residuos, el impacto de la solar es considerablemente menor. En este sentido, podemos observar en el caso de la energía eólica , cómo los dispositivos tecnológicos, en este caso los aerogeneradores, perjudican la vida de las aves. Este impacto negativo puede verse también en los peces de los ríos cuya vida se ve alterada por las instalaciones hidráulicas para la obtención de energía hídrica. Afortunadamente, esto no sucede con las instalaciones solares.
La energía solar es reutilizable y democrática.
Otra de las ventajas significativas de la energía solar es que puede ser reaprovechable.Pero, existe un problema real relativo a todas las energías renovables, y es el hecho de que éstas son irregulares. Por ejemplo, dependen de que sople el viento, que baje el río, suban las mareas o que salga el sol para su transformación concreta en electricidad.
Afortunadamente,en el caso de la energía solar, los avances tecnológicos han permitido que este tipo de energía pueda ser almacenada. Gracias a ello ,podemos disponer de la energía solar almacenada para convertirla en electricidad según sea la demanda requerida.
Por otro lado, se dice que la energía solar es un tipo de energía democrática. Esto se debe a que el costo de la instalación de los paneles solares ha ido disminuyendo de modo gradual a lo largo del tiempo, haciendo que quien quiera acceder a este tipo de energía lo pueda hacer.
Greenpeace avala y fomenta que toda la población pueda acceder al autoconsumo solar con placas solares. Las mismas, pueden ser instaladas en su hogar o en los edificios contiguos, con la autorización pertinente. Esto constituye una clave vital para generar el autoabastecimiento, eje clave de la sustentabilidad de los nuevos tiempos.
La energía solar es una energía ‘adaptable’
La energía solar se conoce como una de las energías más ‘adaptables’ que existen a disposición del hombre. Esto está dado por el hecho que pueden realizarse instalaciones en casas particulares de tan solo pocos metros cuadrados. Y por el contrario, se pueden hacer instalaciones en grandes zonas para la producción de energía eléctrica. Por ello, se dice que la energía solar se adapta a todo tipo de necesidades, terrenos y sociedades.
Otro punto a favor para la energía solar está dado en que genera riqueza, empleo y contribuye al desarrollo sostenible de las comunidades. La permanente reconversión del sector, los nuevos avances técnicos y el desarrollo de carreras relacionadas con la energía solar son cada vez más importantes. Un sector que requiere de profesionales que van desde los estudios de ingeniería, la instalación y la buena operatividad técnica.
También, la energía solar al reducir el uso de combustibles fósiles, hace que baje la demanda social de importaciones energéticas de petróleo. Un hecho destacado que permite a cada sociedad convertirse a patrones autosustentables de vital importancia para su futuro en el corto y mediano plazo.