Monzir Mohammed, es un joven activista de UNICEF que vive en la región del Nilo Azul en Sudán, África. Un área que dibuja la frontera entre Etiopía y el sur de ese país. Esta región ha sufrido como ninguna otra, el impacto del cambio climático y es considerada una de las áreas donde avanza con más velocidad el calentamiento en Sudán. Por ello Monzir, lucha por difundir las soluciones basadas en energías renovables entre los jóvenes de su país.
Corría el año 2019, cuando el jóven Monzir tomó la iniciativa para aportar su granito de arena en la lucha contra el avance el cambio climático en su país, la ardiente tierra de Sudán. Por ello, con unos amigos, formó un grupo llamado Future Generations y se dieron a la tarea de construir el primer coche sudanés alimentado con energía solar y fabricado íntegramente con materiales locales.
El logro fue inédito y de gran ayuda práctica para su comunidad, donde era imperioso encontrar una forma más rápida y segura de ayudar a los niños y jóvenes a llegar a sus escuelas. Un trayecto que por lo general les tomaba, tanto a Monzir como a otros estudiantes, cerca de una hora de caminata hasta los centros de enseñanza. Con este proyecto , estaban convencidos, podrían dar con una solución acertada en movilidad sustentable y económica, que a la vez, protegiera el medioambiente del cambio climático y la contaminación por dióxido de carbono.
“Los motivos para formar este grupo y lanzarnos a la aventura de diseñar el primer coche solar de Sudán, surgieron debido a los crecientes problemas ambientales a los que nos enfrentamos día a día en nuestra sociedad. El abanico es grande: problemas de gran contaminación del medio ambiente , el impacto durísimo del cambio climático, mientras afrontamos una crisis de combustibles en el país, algo que nos ha causado muchos problemas. En lo cotidiano, muchos jóvenes estábamos luchando con las dificultades de desplazamiento a la hora de ir a la escuela, así que pensamos en inventar un coche que funcionara con energía limpia y renovable como es la solar”, explicó el jóven inventor sudánes, Monzir.
El potencial de las renovables en Sudán
Sudán posee un enorme potencial en materia de energías renovables, con ríos que permiten el acceso a una abundante energía hidroeléctrica, altas velocidades del viento y una magnitud de radiación solar única. Por ello, las energías renovables son la clave para el desarrollo de soluciones a los retos climáticos a los que se enfrenta Sudán, donde casi el 60 % de las personas hoy por hoy tienen acceso a la electricidad.
Future Generations se ha comprometido con el empoderamiento de los jóvenes sudaneses para que propicien cambios positivos en su área de influencia más cercana, sus comunidades. Actualmente, el coche solar diseñado por Future Generations ha sido patentado y se encuentra activo, colaborando con el desplazamiento de niños y jóvenes a sus colegios y también a hospitales, siendo éstos servicios básicos. Monzir desea crear con su equipo,en el largo plazo, un espacio propicio para la innovación, donde los jóvenes puedan encontrar inspiración y puedan hallar recursos específicos para dar vida a sus proyectos e ideas para crear productos respetuosos con el medio ambiente.
“Mi intención es transmitir a los jóvenes sudaneses y de toda África, que tengan confianza y apuesten a las energías renovables, en particular en la energía solar . También que tengan fe en sus inspiraciones y se animen a diseñar sus propios proyectos basados en energía solar. África tiene un gran potencial y estos cambios son la clave que ayudarán en la preservación del clima”, comentó Monzir.
Y agregó : “Nuestra propuesta de trabajo, para todos los jóvenes que busquen vivir en una sociedad diferente y para todo el mundo, es que nos ocupemos con ahínco en la creación de soluciones , que mantengamos la paz entre nosotros con el fin de proteger la vida en las comunidades y en el planeta. África sufrirá el calentamiento global como ninguna otra región del globo por eso debemos trabajar arduamente para mitigar los peligros que vendrán sobre estas tierras en unos años. También, el trabajar en soluciones renovables contribuirá a que nos protejamos de la contaminación ambiental y de los desastres naturales que pueden impactar en nuestras regiones”, cerró el jóven Monzir, quien reside actualmente en la capital del Nilo Azul, en Damazin, África y busca con sus amigos, cambiar la suerte del mundo con su pequeña y a la vez titánica y esperanzadora iniciativa.