Gracias a la fuerte inversión privada que rondó los USD 9.200 millones, NY pudo cumplir sus objetivos renovables antes de lo previsto . Hoy su gran avance en desarrollos solares crea miles de empleos sostenibles y ha fortalecido su infraestructura energética
Nueva York es noticia a nivel mundial gracias a que ha visto cumplido su objetivo -mucho antes de lo previsto- de instalar 6 GW de energía renovable de tipo solar antes de 2025, según informan fuentes de NYSERDA, la Autoridad de Investigación y Desarrollo Energético del Estado de Nueva York.
Esta notable capacidad energética sostenible y la adopción rápida de sistemas de energía solar distribuida, fue posible gracias a las alianzas público-privadas que han sido el factor clave de este desarrollo exponencial que vió cumplida su meta un año antes de lo previsto. Por otro lado, este gran logro para el estado de NY se encuentra alineado con el objetivo estatal de alcanzar las cero emisiones de carbono para 2040, en consonancia con la Ley de Energía Limpia y Cambio Climático (2019) .
Un año antes de lo previsto, y apenas cuatro años luego de establecida la Ley de Energía Limpia y Cambio Climático en 2019 , Nueva York ha alcanzado esta importante meta ambiental de instalar 6 GW de energía solar para 2025, marcando un paso muy significativo y exitoso en su lucha para poner un coto al cambio climático y en su marcha o transición hacia fuentes de energía renovable
Un logro notable para NY
Este significativo y auspicioso avance en el segmento de la energía limpia, que fue anunciado en conferencia de prensa por la NYSERDA, representa la llegada de un volumen de energía con capacidad para cubrir la demanda de un millón de hogares, consolidando con ello, la posición de liderazgo del estado de NY en el uso y distribución de la energía renovable en los Estados Unidos.
Por otro lado, el destacado logro resalta la importancia de contar con excelentes políticas públicas y pone de manifiesto el buen trabajo resultante de la cooperación estrecha entre el sector público y privado. Gracias a la implementación de mecanismos para facilitar las regulaciones, al aprovechamiento de los incentivos financieros y al establecimiento de asociaciones con empresas especializadas en el segmento de las energías renovables, el estado de NY ha logrado avanzar en el diseño y puesta en marcha de una red eléctrica resistente y no contaminante,al mismo tiempo que gracias a este proceso ha visto fortalecida su infraestructura energética global.
La Ley de Energía Limpia y Cambio Climático de 2019, ha sido el marco legislativo adecuado que facilitó la rápida expansión de la energía solar en Nueva York. La ley fue la herramienta clave que ha impulsado al estado de NY en su conjunto -hogares, comercios, empresas y edificios gubernamentales- hacia una transición, pronta y masiva – hacia energías renovables. La ley estipula objetivos vitales, claros y medibles para poder reducir las emisiones del cúmulo de gases con efecto invernadero, y marca el rumbo hacia un escenario energético de cero emisiones de cara al 2040.
El rol clave de NYSERDA
En estrecha colaboración con otros organismos estatales,NYSERDA ha sido la responsable de la coordinación de las acciones vitales para alcanzar cada uno de los objetivos del plan de reconversión renovable. Su labor consistió en brindar apoyo mediante líneas de financiamiento y también, el apoyo técnico para el avance de los proyectos solares en todo el estado de NY, tanto en áreas comerciales como residenciales.
La energía solar “distribuida” fue el esquema energético que forjó la clave en el éxito de la reconversión renovable de Nueva York, y que le permitió cumplir el objetivo de 6 GW de generación un año antes de lo pautado en el esquema inicial .
Este tipo de energía llamada “distribuida” se destaca por su generación descentralizada, donde comercios, empresas, hogares y los parques solares de mediana envergadura, toman el rol de productores activos de energía, cuyo volumen es capaz de abastecer no solo a los propios consumidores-productores, sino que puede volcar su excedente a la red energética estatal.
En el estado de Nueva York, los sistemas solares de energía distribuida se han proliferado, impulsados por interesantes incentivos económicos y financieros y con políticas que han convertido la instalación de paneles fotovoltáicos en casas y edificios en una operación sencilla y expeditiva.