Greenpeace celebra el liderazgo de Brasil en la región Cono Sur, en el camino hacia la reconversión energética con el impulso de numerosos proyectos renovables. Frutos que en un futuro cercano serán más que rendidores para un país que quiere apostar fuerte al cuidado de su riqueza natural y contribuir con el cuidado del planeta.
Brasil, el gran país de riquezas únicas cuyo aporte al bienestar global con su importante pulmón natural es indiscutido, viene trabajando arduamente para lograr sus metas ambientales. En este sentido, sus proyectos en materia de energía renovable, en los últimos tiempos, vienen dando que hablar al mundo por su gran despliegue, como es el hecho de la cantidad notable de energía limpia que puede generar y ser vertida a las redes de abastecimiento local.
En esta dirección, se destaca la concreción de un hito histórico para el país : la generación de energía a partir de biomasa en 2023 registró un aporte récord de 3.219 megavatios promedio (MWm) al Sistema Interconectado Nacional (SIN). Este gran logro representa alrededor del 4,6% de la demanda total de energía consumida durante el pasado año, según datos aportados por la Cámara de Comercialización de Electricidad (CCEE), dependiente del Ministerio de Minas y Energía.
El ministro de Minas y Energía, Dr Alexandre Silveira, destacó el compromiso de Brasil con las energías no contaminantes y limpias, señalando que el 93,7% de la electricidad del país generadas en 2023 tuvo su origen en fuentes de tipo renovables , consolidando a Brasil nuevo líder mundial en la senda de la transición energética del planeta. “Nos sentimos orgullosos de haber conseguido este hito en materia de energías renovables. Trabajamos mucho para ello, sin descanso, con ferviente compromiso e iniciativa, buscando lo mejor para Brasil, sus empresas energéticas y la gente. Hoy más que nunca, debemos redoblar los esfuerzos en el camino de la conversión energética, el planeta lo necesita, y no podemos demorarnos. Nuestra producción y la economía del futuro para ser sustentable necesita hacer los esfuerzos hoy. Este hito que hemos alcanzado es un gran incentivo para seguir avanzando y nos muestra con claridad que estamos haciendo bien nuestro trabajo”indicó Silveira.
Brasil en la senda hacia un futuro sostenible
El récord anterior en este segmento, que fuera establecido en 2020, se superó el presente año gracias al aumento de la capacidad instalada de biomasa en un total de 223 MW. Se proyecta en el corto plazo, un incremento adicional de unos 1.155 MW para lo que resta de 2024, marcando un hito sin precedentes para el sector en este camino histórico hacia la reconversión total de la matriz energética del país. Un paso de gran trascendencia para lograr la meta de la carbono neutralidad para el 2030, suscrita por varios países en el Acuerdo de París firmado en la COP 27 en 2015.
El hito alcanzado por Brasil, se debió en gran parte a la contribución de la biomasa que aportó entre el 3,3% y el 4,9% a la generación de energía a lo largo de 2023. Este importante rendimiento se basó en alrededor de 637 proyectos alimentados con biomasa en todo el territorio brasilero, siendo los desechos de la caña de azúcar, conocido como bagazo, la principal fuente en 423 de ellos, generando un total de 12.410 MW.
Además, se destaca la participación de 76 plantas que utilizan residuos forestales, generando 830 MW, mientras que el biogás aporta un total de 201 MW a la matriz energética del país. Con sorpresa en este escenario, se observa que el licor negro, un subproducto de la industria papelera, alimenta a unos 22 proyectos generando una potencia colosal que alcanza unos 3.334 MW y le permite posicionarse como la segunda fuente más poderosa dentro de las subfuentes de biomasa.
Crecimiento de la generación de energía
En cuanto a la expansión que tuvo la generación de energía renovable en Brasil durante 2023, se verificó un aumento récord de 10.400 MW, siendo la cifra más alta en la serie histórica. La puesta en marcha de un total de 291 plantas contribuyó en gran medida a hacer posible este gran crecimiento, siendo los parques eólicos los más prominentes con la puesta en marcha de 140 nuevas instalaciones que generaron 4.920,0 MW, representando el 47,66% de la expansión total de la matriz energética.
En segundo lugar, se ubican las plantas solares fotovoltaicas con un aporte significativo de un total de 4.070,9 MW provenientes de 104 nuevas instalaciones. Completan la expansión, 33 centrales termoeléctricas, 11 centrales hidroeléctricas pequeñas y 3 centrales hidroeléctricas de gran capacidad que también entraron en operación en 2023, demostrando el compromiso firme y continuo de Brasil con la diversificación y el aumento de la capacidad de generación eléctrica mediante con base en fuentes renovables.